MARIÑEIRAS DE CECINA

Buenos días a todos, nuestra imaginación es libre y podemos preparar infinidad de tostas y aperitivos, pero habéis probado a preparar unas mariñeiras con cecina, no os dejarán indiferentes, tan ricas están que es imposible tomar solo una, esto no es una receta, porque no lo considero así, sino una idea, una forma de preparar un aperitivo que a todos les gustara.

Estamos en fin de semana y después de la reciente vuelta de las vacaciones es el mejor momento para relajarnos, para disfrutar de un aperitivo y si encima es con productos de las tierras leonesas para recordar los días pasados mejor que mejor, como estas mariñeiras de cecina.

¿QUE ES LA CECINA?

La cecina es una variedad de embutido de carne de vacuno, ahumada y secada, es un embutido poco salado y normalmente se utiliza la pata de la vaca para su elaboración. La cecina de León con Indicación Geográfica Protegida, donde el clima seco y la altitud ofrece que se el lugar más apropiado para la elaboración artesanal de este exquisito manjar, donde en alguna casas aún se sigue elaborando y los primeros conocimientos sobre la elaboración de este embutido data del siglo I d.C.

Este embutido está sometido a varios operaciones antes de su consumo y todos ellos se mantienen artesanalmente como el perfilado, el salado para favorecer su curación, el lavado para eliminar la sal de la curación, Asentamiento para eliminar el agua sobrante y favorecer la penetración de la sal homogéneamente, A continuación toca ahumar las piezas, que se realizara utilizando para la leña la madera de roble o de encina y por último el secado, secándose naturalmente en espacios que regulan la temperatura, todo este proceso tiene una duración de siete meses desde el salado hasta que llega al consumidor.

La cecina era y es una de las provisiones de los pastores durante la trashumancia (traslado) de las merinas por las cañadas para pasar el invierno en el sur de España, este viaje se hace la mayor parte a pie.

En esta ocasión en vez de utilizar unas tostas de pan e utilizado unas galletas mariñeiras con aceite de oliva, que se han vuelto incondicionales en casa, os puedo asegurar que tanto solas como acompañadas son un vicio, crujientes, resisten y no se quedan blandas, aunque hayamos preparado con antelación el aperitivo, crujientes y además las podemos encontrar en diferentes variedades, la ventaja de estas galletas es que son grandes y resistentes, no se rompen con facilidad, de esta manera podemos poner ingredientes a nuestro antojo sin peligro de que se rompa. Vamos con el aperitivo.